El calendario júnior planificado por la RFEC, sin pies ni cabeza: los retos deportivos, en período de exámenes
La Real Federación Española de Ciclismo (RFEC) ha anunciado de forma oficial el calendario para la temporada 2025 de carretera. Y resulta incomprensible la planificación diseñada por los gestores del ciclismo español al concentrar los objetivos deportivos más importantes del año para ciclistas de sólo 17 y 18 años ¡en pleno período de… exámenes!
La categoría júnior es cada vez más complicada al haberse convertido desde hace años en una edad en la que se compite en un calendario nacional y ya no autonómico, lo que obliga a los corredores a viajar cada fin de semana por toda la geografía española. Pero es que además tampoco se está protegiendo el período de exámenes sino más bien al contrario, lo que está generando un proceso perverso, con cada vez más ciclistas abandonando los libros por la bicicleta, circunstancia que está creciendo en el seno de la propia selección nacional, algo que en el fondo también está siendo promovido por los que deberían evitarlo.
Y es que no debemos olvidar que los dos años como júnior coinciden con dos años decisivos en la vida como estudiantes: 1º y 2º de Bachiller. Por tanto, hay que tener en consideración que en su segunda temporada júnior los corredores que quieren ir a la Universidad deben superar la EBAU (antigua selectividad), exámenes que prácticamente en toda España se celebran los días 4, 5 y 6 de junio.
Con esos condicionantes, sorprende muchísimo que la RFEC planifique la temporada de la forma que lo ha hecho: de las siete pruebas de la Copa de España júnior (challenge que depende de la RFEC), un total de tres están metidas en junio. El día 1, por ejemplo, se corre la Cursa del Llobregat, por lo que los ciclistas tendrán que correr y regresar a su casa poco más de 48 horas antes del primer examen de la EBAU. Además, los días 14 y 15 de junio hay otras dos citas de la Copa de España: Clásica Araba y Memorial José Luis Junco. Luego, tenemos del 19 al 22 la Vuelta al Besaya, una de las más importantes. Y los campeonatos de España.
En países como Portugal, sin embargo, han colocado los campeonatos de Portugal para la categoría júnior en los meses de verano y sirven incluso como preparación final para campeonatos de Europa y campenatos del Mundo, lo que elimina una gran parte del estrés de los corredores al convertir junio en un mes sin tanto aliciente deportivo. Curiosamente, en España, la Copa de España no incluye ni una sola carrera en meses como abril, mayo y julio y pasa sin actividad desde el 23 de marzo hasta el 1 de junio. Y también sorprende que no se aproveche ni uno solo de los fines de semana de septiembre, período con buena meteorología, sin tantas restricciones de tráfico y con el curso muchas veces sin empezar o en sus primeros días, algo muy diferente a lo que sucede en pleno mes de junio.
