Mientras un grupo grande de ciclistas siguen peleando por la victoria en el Giro de Italia de 2023, otro grupo muy importante trabaja a conciencia en duras concentraciones en altitud con un único objetivo en sus mentes: llegar en el mejor momento de forma del año a la salida del Tour de Francia. El último entrenamiento de Wout van Aert es un buen ejemplo de lo que significa preparar la gran carrera franceca.
Los datos en Strava, recogidos por Cyclismactu, reflejan el nivel de exigencia al que se someten los ciclistas profesionales en esas concentraciones en altitud. Con el título «pequeña vuelta con los colegas», Wout van Aert desveló el entrenamiento que había hecho junto a Dylan Van Baarle, Christophe Laporte y Johannes Staune-Mittet. En total, fueron 244 kilómetros, 5.329 metros de desnivel acumulado, 7 horas y 33 minutos, una media de 32,2 kilómetros por hora… En definitiva, jornadas de preparación que son más exigentes todavía que una etapa del Tour.
Y ese entrenamiento no fue una excepción. Apenas un par de días más tarde completaron 212 kilómetros, a casi 31 por hora, con 4.228 metros de desnivel… La conclusión es obvia: el camino hacia el Tour pasa por el sufrimiento previo en las concentraciones en altura durante el mes de mayo. En junio habrá que competir para conseguir ese ritmo que dan las carreras y, más tarde, volverán a otra concentración en altura ya mucho más corta antes de ir a la salida del Tour.