Caja Rural-RGA, vuelta a los orígenes en 2020
El Caja Rural – Seguros RGA es el equipo más asentado de los tres ProTeams españoles para la próxima temporada. Sin embargo, cada año le toca vivir una auténtica revolución para sacar adelante su plantilla profesional.
De cara a 2020, la escuadra navarra ha completado una plantilla de 21 corredores, con 9 altas y 9 bajas, entre las que destaca la marcha de Álex Aranburu a Astana. Es decir, casi la mitad de los ciclistas serán nuevos, además del preparador físico Xabier Muriel, que llega como responsable deportivo de la escuadra navarra tras dejar huella por su trabajo en el Euskadi-Murias de Jon Odriozola.
Desde sus magníficos 2015 y 2016, con Barbero, Fraile, Bilbao, Prades, Carthy o José Gonçalves, Caja Rural-RGA no ha vuelto a encontrar la clave del éxito, aun cuando su mejoría en la segunda mitad de 2019 ha sido notable. La lista de fichajes extranjeros que no han rendido es larga: Celano, Page, Trofimov, Butler, Yssaad, Banaszek, Chernetski… pero la dirección del equipo se ha movido de manera diferente este mercado.
Para empezar, destacan los cuatro ascensos de su equipo filial, la cantidad más alta desde 2012. El escalador colombiano Juan Fernando Calle (1999) y los polivalentes Oier Lazkano (1999), Sergio Martín (1996) y Carmelo Urbano (1997) han firmado su primer contrato profesional tras brillar en el calendario amateur, amén del ecuatoriano Jefferson Alveiro Cepeda (1996), ascendido del filial en agosto de 2019.
Además, por primera vez desde 2013, todos los nuevos corredores extranjeros son hispanohablantes. Desde América llegan tres jóvenes promesas, pero que podrían ser referentes desde su llegada a Caja Rural-RGA, especialmente en la montaña, el punto débil del equipo en 2019.
Jhojan García (1998), escalador puro, era la joya del Manzana Postobón y este año acabó octavo el Tour del Porvenir. Alejandro Osorio (1998), escarabajo más explosivo, también ganó la montaña del Porvenir en 2018 y fue sexto en el Giro sub23. Y el tercer fichaje latino es el venezolano Orluis Aular (1996), procedente del Matrix Powertag japonés, donde ha conseguido 12 victorias UCI aprovechando su punta de velocidad y potencia para superar los repechos. Los mencionados Calle y Cepeda completan la nómina de sudamericanos.
Las otras dos incorporaciones provienen del desaparecido Euskadi-Murias: Aritz Bagües (1989) y Héctor Sáez (1993), que ya pasó por los equipos amateur y profesional de Caja Rural-RGA. Dos ciclistas completos y experimentados, que pueden trabajar para sus líderes o buscar sus propias oportunidades en escapadas.
Salvo Aranburu, Caja Rural-RGA mantiene a su columna vertebral entre los 12 ciclistas que continúan. Jon Aberasturi, con tres victorias en 2019, y Matteo Malucelli, del que se espera más tras quedarse a cero este año, se repartirán el protagonismo en las llegadas masivas.
Asimismo, habrá que seguir con lupa la progresión de los puncheurs Gonzalo Serrano y Jonathan Lastra y los escaladores Cristián Rodríguez y Julen Amezqueta, que están en disposición de dar un salto de calidad en 2020. Álvaro Cuadros, Xavier Cañellas, Joel Nicolau, Jon Irisarri y David González, todos ellos procedentes en su día del equipo filial, completan una plantilla de 21 corredores, en la que 14 de ellos han pasado por el equipo amateur.
Toda una apuesta por los orígenes para retomar el rumbo del equipo en un año en el que tendrán que ganarse deportivamente la invitación a La Vuelta, ante la competencia de Burgos BH y la Fundación Euskadi. Al menos uno de los tres equipos españoles se quedará fuera y la lucha aporta un motivo más para que Caja Rural – Seguros RGA empiece a lucirse desde la primera carrera de 2020.
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