Chris Froome (1985) quiere su quinto Tour de Francia. Sueña y sobre todo lucha por ello cada día. Su grave caída del año pasado interrumpió ese deseo pero no lo rompió. El líder del Team Ineos quiere volver a intentarlo. Se siente recuperado para volver a reinar en París.
Froome ha lanzado un significativo mensaje, y un vídeo, en las Redes Sociales: «Ir por mi quinto Tour después de mi caída el último año podía parecer imposible, pero aquí estoy y preparado para ello». Desde luego, el retraso del Tour dos meses, entre el 29 de agosto al 20 de septiembre, ha favorecido el británico para completar su recuperación de su grave accidente en el Critérium Dauphiné: se fracturó la cadera, el codo, el fémur, el esternón y varias vértebras.
Ganar su quinto Tour, e igualar de paso a Miguel Induráin, Bernard Hinault, Eddy Merckx y Jacques Anquetil, se ha convertido en su ansia, en su apetito que no le ha hecho arrojar la toalla. Sin duda, se trata del mejor vueltómano en la última década; desde 2011, ha disputado 14 grandes vueltas… y ha alcanzado el podio en 11, con siete victorias; su peor puesto es un cuarto, al margen de dos abandonos. El recorrido de la edición 2020 no le disgusta.
Going for my 5th @LeTour after my crash last year may seem impossible but I’m here and ready for it 🙌 #nohumanislimited #cycling #comeback pic.twitter.com/85d6IaDKMZ
— Chris Froome (@chrisfroome) 25 de abril de 2020
En su contra, puede pesar su edad, 35 años en mayo, y que Egan Bernal y Geraint Thomas son otros aspirantes al Tour y en el seno del Team Ineos. Froome regresó en el pasado mes de febrero en el UAE Tour después de más ocho meses de su caída en el Dauphiné. En 2019, solo disputó 25 días de competición, siendo sus mejores resultados 11º en el Tour of the Alps y 13º en el Tour de Yoskhire.
El ciclista británico suma cuatro ediciones del Tour (2013, 2015, 2016 y 2017) -y fue segundo en 2012 y tercero en 2018-, dos de la Vuelta a España (2011 y 2017) -segundo en 2014 y 2016- y una del Giro de Italia (2018). Su último triunfo es el del Giro 2018.