Ciclismo en pista: Introducción a la Puntuación (I)
Foto: RFEC
Entre las diferentes modalidades del ciclismo se encuentra el ciclismo en pista, muy conocido en algunos entornos y lejana en otros. Después de celebrarse los JJOO de Rio de Janeiro, se ha iniciado un nuevo ciclo olímpico. En pocas semanas se celebrará el Campeonato del Mundo en Hong Kong (entre el 12 y el 16 de abril). Utilizando esta fecha señalada intentaré acercar esta modalidad al público en general y proponer ciertas pinceladas de la preparación para los más interesados en los sucesivos tres artículos.
El ciclismo de pista abarca diferentes pruebas con características particulares cada una de ellas. Hay pruebas consideradas de velocidad: pruebas cortas y explosivas, en las que priman la fuerza, la potencia y la velocidad. Por otra parte, hay pruebas definidas como de fondo en las que las condiciones relacionadas con la resistencia cobran mayor relevancia.
En la siguiente tabla se pueden observar las pruebas más importantes divididas entre, pruebas de velocidad y pruebas de fondo, y, pruebas individuales y de conjunto:
Por lo tanto, cada tipo de prueba requiere de unas condiciones específicas. Expondré como ejemplo la prueba de puntuación para proponer una esquematización general del entrenamiento para las pruebas de fondo. Esta propia dinámica de análisis y propuesta se podría realizar para cada una de las pruebas.
La prueba de puntuación se define como “la especialidad en la cual el puesto final viene determinado por los puntos acumulados por cada corredor en los sprints intermedios y las vueltas ganadas” (reglamentación de la Unión Ciclista Internacional).
La distancia y el número de sprints dependen de la categoría de la prueba. Por norma general, los Campeonatos del Mundo de categoría élite tienen las siguientes características:
Como se puede observar en la tabla, la prueba de puntuación, consiste en puntuar en los sprints intermedios y conseguir puntos ganando vueltas a los demás, intentando evitar que otros las ganen. En este juego, la capacidad de realizar esfuerzos cortos de alta intensidad y la capacidad de mantener intensidades altas durante cierto tiempo se intuyen claves.
Tal y como sucede en todos los deportes, la propia reglamentación determina en cierta medida la dinámica de competición. Teniendo en cuenta esta variable, unida a la dinámica real de competición y sus requerimientos de esfuerzo físico intentaré proponer un esquema general de competición. Una vez definido este patrón general de competición, puede resultar más fácil realizar propuestas eficientes de entrenamiento.
Este discurso se desarrollará en los siguientes dos artículos:
- Dinámica de competición y requerimientos físicos (II)
- Propuesta de entrenamiento y conclusiones (y III)
