Diario del ciclista secreto en la Vuelta: La semana más dura del año
Empiezo este diario del ciclista secreto confirmando el plan: jamás diré quién soy. Es la mejor manera de sentirme libre escribiendo y de garantizar que no habrá filtro en mi objetivo fundamental: hacer que todos los lectores vivan más de cerca lo que significa correr una carrera de tres semanas y más concretamente la Vuelta a España.
Para el que no lo sabe, la semana más dura del año son los días previos a la disputa de la Vuelta. Medio en broma y medio en serio, solemos decir que cuando la carrera empieza, es cuando todos podemos descansar. Os parecerá ridículo, pero lo digo muy en serio. En esos días hay que asistir a eventos con patrocinadores, a la presentación propia de la carrera, a pasar todos los controles antidopaje, a pasar todos los controles antiCOVID… Todo son obligaciones y horarios. Todo son normas y estrés. La locura llega al punto de que olvidas cuál es el objetivo con el que has viajado a Burgos: disputar la Vuelta de 2021.
Si esto es lo que pensamos los corredores, todavía más es lo que piensan los mánagers de los equipos, los mecánicos, los masajistas… Todos se pasan un montón de días en Burgos preparando los últimos detalles de cada vehículo, de cada bicicleta, de cada patrocinador técnico… No contaremos interioridades feas, pero sí os digo que este año no hay un solo equipo que viva relajado con el material. La crisis que afecta al cicloturista y a las tiendas de bicicletas también está afectando a los equipos profesionales de cualquier nivel. Cuesta encontrar repuestos y si tu manager decidió vender las bicis del año anterior pensando que este año recibiría todo sin novedad… tu equipo vivirá un infierno. Por eso mismo los mecánicos son los más afectados en este 2021.
Ahora mismo os podría contar muchas más cosas… pero es mejor parar cuando ya se ha conseguido la atención del lector. Y eso es lo que yo he intentado con estas pinceladas rápidas. No os preocupéis: habrá muchos más capítulos en esta novela que el sábado comenzamos con una sonrisa por dejar atrás tanto test, tanta reunión, tanta charla y tanta foto. Somos leones enjaulados y necesitamos libertad para empezar a correr. Ni más, ni menos.