La empresa asturiana Siroko ha llegado al ciclismo profesional de la mano de Burgos Burpellet, equipo en el que se ha convertido en proveedor de ropa y copatrocinador. Pero, además, Siroko está lanzando un buen número de iniciativas de lo más curiosas, como la fusión de ciclismo y fútbol en una iniciativa más que interesante.
Siroko es un fabricante de ropa deportiva que nació en 2016 y que tiene el objetivo de facturar más de 100 millones de euros en el corto plazo. En 2023 ya logró facturar 40 millones y su crecimiento en los dos últimos años ha sido extraordinario para una empresa que cuenta con más de 500 empleados. Ahora, Siroko se ha instalado en el fútbol con el patrocinio del Sporting de Gijón. Pero ha querido ir más allá y ha lanzado una línea de ropa de ciclismo con los colores del club de fútbol asturiano.
La colección de ropa deportiva de ciclismo incluye hasta 19 productos y ha agotado sus existencias en sólo un mes certificando la gran acogida que este tipo de productos pueden tener, una vía muy bonita de fusionar la pasión por el fútbol y la pasión por el ciclismo, dos deportes totalmente compatibles.