Estamos en la traca final del Giro de Italia. Es cierto que la ausencia del Gavia duele, pero sigue habiendo por delante una semana muy atractiva en la que se terminará de decidir quién se hace con la maglia rosa en Verona.
La etapa de Ponte di Legno, como decíamos, queda un tanto deslucida porque lo de Gavia-Mortirolo seducía mucho, y Aprica no tiene la entidad necesaria para sustituir al coloso. Pero el Mortirolo por sí mismo es ya un elemento disuasorio de primer orden y seguro que habrá diferencias.
Por lo demás, tanto el miércoles -día para fugas- como el jueves, un oasis para los sprinters en medio de tanta rampa, las tres últimas jornadas vuelven a ser muy exigentes. Y ya no quedan muchas más oportunidades de ganar etapas ni de asaltar el liderato.
Un respiro en el camino, el jueves.
El viernes tendrá lugar una etapa casi unipuerto. No tanto, pero es cierto que la gran dificultad estriba en esa subida final a San Martino di Castrozza, de 13,6 kms al 7,6% de media. El último ‘tappone’ será el del Monte Avena con hasta cinco puertos, incluido el Passo Rolle (20,6 kms al 4,9%), Manghen de 18 kilómetros al 7,6% y la Cimma Campo antes del doble paso por Croce D’Aune, con esas rampas del 16% casi al final. Si todavía quedase algo por decidir, lo hará en la crono final de Verona. Sólo 15 kilómetros, pero un día en el que las fuerzas son vitales para hacer más diferencias de las previstas.
- 16ª etapa, martes 28: Lovere – Ponte di Legno, 194 kms. Montaña
El nuevo perfil.
- 17ª etapa, miércoles 29: Val di Sole – Anterselva, 180 kms. Accidentada
- 18ª etapa, jueves 30: Valdaora – Santa Maria di Sala, 220 kms. Llana
Un respiro en el camino, el jueves.
- 19ª etapa, viernes 31: Treviso – San Martino di Castrozza, 151 kms. Montaña, final en alto
- 20ª etapa, sábado 1: Feltre – Passo Croce D’Aune, 193 kms. Montaña, final en alto
- 21ª etapa, domingo 2: Verona – Verona, 15,6 kms CRI