David de la Cruz (1989, QuickStep Floors) ha sorprendido al pelotón y los grandes favoritos y ha alzado los brazos en San Sebastián-Donostia, tras un ataque en la última ascensión. El de Sabadell también viste el maillot amarillo de líder.
De la Cruz saltaba en Mendizorrotz, tan fuerte que se iba en solitario. Y tan fuerte estaba que aguantaba hasta meta y lograba una nueva victoria. Un triunfo que certifica su calidad. Un despegue que comenzó en la pasada Vuelta a España, cuando se estrenó en el Naranco; y que dio continuidad con su notable triunfo el último día en la París-Niza, por delante de Contador.
“Tengo pocas victorias y esta es muy especial porque las otras había sido en fuga y esta ha sido arrancando desde el pelotón, afirmaba el catalán en la línea de meta. “Ha sido un día muy bonito. El equipo ha estado fantástico y me ha ayudado lo máximo”.
No esperaba quedarse solo en cabeza de carrera y a 13 de meta. “Cuando he arrancado y me he visto solo, sabía que era un movimiento ambicioso, porque daba el viento de cara, pero he pensado en hacer una contrarreloj y ‘si hay suerte y suena la flauta…’ Tenía que aprovechar esta oportunidad”, destacaba.
“He tenido piernas, suerte y he podido conseguir la victoria. Cuando he llegado a meta me han dicho que también había ganado Kittel así que el día ha sido perfecto”, añadía feliz.
What a team @quickstepteam!!! Congrats @marcelkittel and @delacruz_sbd ??? 2 in 1 Day.
— Yves Lampaert (@yveslampaert) 5 de abril de 2017
Ahora es el líder, con tres segundos sobre el resto de favoritos, Valverde, Contador, Henao, Kwiatkowski, Urán… “Hay que ver cómo pasan los días, porque es una vuelta dura y el nivel es muy alto. Hay corredores de mucha categoría. Está claro que estoy bien y veremos si podemos aguantar. Como dice el Cholo (en referencia a Simeone, entrenador del Atlético de Madrid), partido a partido”, bromeaba.