La restauración de Ismael Esteban: “Necesito superar miedos”

Ismael-esteban-legazpi-2017

Esteban, en una imagen de esta temporada. Foto: Fundación Benicadell

Ismael Esteban (1983, Ginestar-Delikia Sport) fue la gran sorpresa de la pasada temporada de ciclocross; gran dominador del calendario nacional y con grandes destellos internacionales. Sin embargo, un importante accidente en el gimnasio, con resultado de fractura de dos vértebras, ha estado a punto de acabar con la carrera del cántabro, que intenta volver a su mejor nivel tras superar “un calvario” de recuperación.

El propio Esteban lo explica: “En plena pretemporada, en el gimnasio, haciendo series de fuerza, al colgar la barra se escapó la pesa de 150 kilos y me cayó encima, rompiéndome dos vértebras. En ese momento pensé que no volvería a montar en bicicleta”, rememora. El cántabro buscaba empezar su temporada con el nuevo equipo Ginestar-Delikia Sport donde también está el vigente subcampeón del mundo sub23, el alicantino Felipe Orts.

La pasada campaña puso a Isma en el punto de mira: campeón de España, ganador de la Copa de España y de la Challenge Euskadi e incluso llegando a ser 12º en la Copa del Mundo de Fiuggi. No paró de sorprender. Estaba rozando el top 10 en el Mundial de Bieles (Luxemburgo), pero nada menos que cinco pinchazos en la parte final le apartaron hasta la 27ª plaza final.

ginestar-delikia-presentacion-2

Esteban, en el centro, con Felipe Orts y Elena Lloret. Foto: RFEC

Ahora mismo, su batalla es la de volver a encontrar el ritmo, y sobre todo la confianza. “A día de hoy llevo un mes y medio entrenando con normalidad, si bien aún me queda mucho por recuperar. Físicamente me encuentro muy bien. Voy asimilando entrenamientos y el cuerpo responde como espero. Es mentalmente donde más me cuesta. Necesito superar miedos y dudas acerca de volver a recaer en la lesión y volver a empezar el calvario de la recuperación del que aún estoy saliendo”, explica.

Esteban pudo volver a la competición hace un mes, en la prueba de la Copa de España disputada en Llodio, con la temporada empezada para el resto. “Claramente es una desventaja, ya que estoy empezando de cero en plena temporada cuando los demás están ya en forma. Seguramente cuando acabe esta temporada todavía no estaré recuperado del todo. Todavía me falta mucho para estar al nivel que estuve”, apunta después de que sus resultados hayan podido ir mejorando (4º en Elorrio) y haya podido reaparecer en las Copa del Mundo de Bogense (Dinamarca) y Zeven (Alemania).

El cántabro, a sus 34 años, confía en poder volver a ofrecer su mejor nivel en la parte final de la temporada. “Una de las razones por las que me estoy sacrificando tanto es porque confío en mis posibilidades y en llegar a tope al final de temporada”, explica, admitiendo su prisa por volverse a sentir competitivo: “Si he empezado a correr tan pronto ha sido por mi propia necesidad de verme evolucionar física y mentalmente. Además, estoy convencido que, mientras siga disfrutando de lo que hago, los resultados irán llegando poco a poco”, zanja optimista.

Vídeo: El regreso de Ismael Esteban, «¡la mejor carrera de mi vida!»