Mikel Landa (1989, Bahrain-McLaren) confía en «aprovechar la oportunidad» y «estar delante» en un Tour de Francia «muy montañoso». Al menos, no va a dejar nada al azar; primero, va a inspeccionar en Francia las etapas alpinas de la carrera con sus compañeros de equipo y a partir del 8 de julio se concentrará dos semanas en Andorra (Mikel Landa: «La continuidad del equipo está garantizada»).
Landa quiere aspirar a todo desde la salida. «Me gustaría que el planteamiento inicial fuese el de correr para ganar, quizá de una manera más conservadora y ojalá vaya todo bien y pueda aprovechar la oportunidad que me están dando, si me dejan liderar el equipo y tengo un equipo que me arropa en todos los momentos, tanto en los buenos como en los difíciles espero estar adelante», destaca en una entrevista en el programa ‘TDP en casa’, en Teledeporte. El recorrido del Tour 2020 le favorece sin duda: «Este año el Tour es muy montañoso, desde la primera semana, hay muchas etapas nerviosas, así que hay que llegar muy bien. Tenemos tiempo para ello y no estamos muy cansados de competición. Hay que intentar llegar en muy buena condición y que aguante hasta el final…».
Para ello confirma su calendario, empezando por la Vuelta a Burgos, una carrera en la que inauguró su palmarés en 2011 y que ganó en 2017: «Este año va a tener una participación mejor que otros años porque todos estamos buscando días de competición, calendarios alternativos para llegar al Tour lo mejor posible. Es una Vuelta que me gusta mucho, a la que tengo muchísimo cariño…. Después de Burgos haré probablemente la Clásica de Getxo, que es al día siguiente y Dauphiné. Dauphiné tiene cinco etapas exigentes este año. Es importante correr en Francia». El exigente Mundial de Aigle-Martigny (Suiza), una semana después de llegar a París, también está en su mente.
No tiene claro, sin embargo, si disputará la Vuelta a España: «En condiciones normales hubiese estado seguro, pero ahora no me atrevo a decir si después del Tour estaré en condiciones tanto físicas como mentales para afrontar una Vuelta a España…. No la tengo descartada, la verdad. Es medio por el norte y conozco muchas de las etapas y llevo años sin correrla también, así que me gusta, pero ya veremos cómo llegamos a noviembre». No corre la ronda española desde 2015, cuando ganó una etapa.
Landa afronta su undécima temporada y volver al podio de una grande es su ambición; el de Murgia fue tercero en el Giro 2015 y se quedó a las puertas, cuarto, en el Tour de Francia 2017, a un segundo de Romain Bardet, y en el Giro 2019, a ocho de Primoz Roglic. «Me noto más maduro, tanto física como mentalmente. Cada temporada que termina digo, joer, creo que la temporada pasada no sabía lo suficiente. Me siento más fuerte y con más facilidad a veces para coger la forma, para mantenerla y la verdad es que estoy disfrutando mucho. Ahora he llegado a un equipo nuevo que me está dando una gran oportunidad», destaca en el canal deportivo de Radio Televisión Española.
Para el escalador vasco será su quinta participación consecutiva en el Tour, en el top10 las tres últimas ediciones: cuarto en 2017, séptimo en 2018 y sexto el año pasado. Este 2020, debutó en la Vuelta a Andalucía y lo hizo a un nivel alto, tercero en la general final, solo cediendo ante un intratable Jakob Fuglsang en Grazalema y empezando la temporada al ataque. Sin embargo, renunció a la París-Niza por una fisura de costilla, una lesión que arrastraba desde su atropello el 1 de febrero.
Max Sciandri: «Landa tiene un potencial increíble, pero a veces le faltan…»