El ex director deportivo del equipo ciclista W52-FC Porto, Nuno Ribeiro, ha admitido que existía una red de dopaje organizado en el seno de su equipo. Sin embargo, ha argumentado que todo era responsabilidad del patrocinador del equipo: Adriano Quintanilha.
Nuno Ribeiro es una de las piezas clave en el juicio de Prova Limpia, una operación policial y judicial que acabó con la desaparición del equipo W52-FC Porto tras comprobarse que existía una red de dopaje organizado. Ahora, el ex director del equipo, Ribeiro, acepta esa red de dopaje generalizado. Pero coloca toda la responsabilidad sobre los hombros de Adriano Quintanilha.
En sus declaraciones, recogidas por la agencia Lusa, Nuno Ribeiro ha explicado: «Nunca tuve el dinero para dopar ni instigué el uso del dopaje. Fue y siempre fue el señor Adriano Quintanilha quien lo hizo. Adriano gastó miles de euros patrocinando estas prácticas de dopaje. Quería, podía, mandaba y pagaba. Lo sabía todo, quería ganar a toda costa y decía: ‘Pago para ganar y gano’. Se lo echaba en cara a los ciclistas y les amenazaba. El ambiente era infernal«.
Nuno Ribeiro ha prestado declaración en solitario, puesto que ha exigido que no hubiera nadie en la sala y, sobre todo, que no estuviera un Adriano Quintanilha que, según Ribeiro, le ha amenazado e incluso ofrecido dinero a cambio de que aceptara la responsabilidad de lo ocurrido. La versión de Ribeiro ahora es: «No me sentí un criminal. Fui débil por ceder. Debería haber dicho no. Me siento triste y arrepentido. Sé lo equivocado que estuve y pido perdón a la sociedad, a todo el mundo, pero sobre todo a mis ciclistas«.