Si existe algún elemento que condiciona la posición del ciclista encima de la bicicleta, ese es el cuadro. Sus características geométricas no solo influirán en el manejo y control que tendrá el ciclista sobre la bicicleta, también tendrán una influencia directa sobre la postura, la comodidad y la eficacia de este.
Un apunte antes de seguir a tener en cuenta sobre “el manejo y el control”: bicicletas con distancia entre ejes menores serán más manejables, muy rápidas a la hora de reaccionar, pero más inestables en las bajadas que bicicletas con distancias mayores entre ejes.
Por todo esto, cuando se vaya a adquirir una nueva bicicleta, el punto de partida debería ser la elección del cuadro que tendrá estar acorde con las necesidades y objetivos del ciclista, permitiéndole llegar a su posición ideal en combinación con unos componentes lógicos. Con esto nos referimos a que no haya que usar composiciones extremas como por ejemplo 4 o 5 cm de anillas espaciadoras en el tubo de dirección junto con una potencia de 70 mm con inclinación positiva de 22º.
Cuando un ciclista está pensando en comprar una nueva bici, su principal preocupación reside en qué modelo elegir y que talla (aunque también sabemos que la elección del color es otra gran preocupación).
Los dos valores geométricos más importantes a tener en cuenta a la hora de elegir la talla y el modelo del cuadro son el stack y el reach, dos valores que definen el alto y el largo del cuadro respectivamente.
La altura (stack) es la distancia vertical (elevación) entre el centro del eje pedalier con respecto al centro del extremo superior del tubo de dirección. Representa la altura de conjunto de manillar, cuánto de alto va estar este.
La longitud (reach) es la distancia horizontal entre el centro del eje pedalier con respecto al extremo superior del tubo de dirección. Representa la longitud del cuadro, cuanto de lejos se va a encontrar el manillar.
Estos dos parámetros van a definir las características del cuadro en cuanto a comodidad y en cuanto a tamaño, es decir, la posición y como consecuencia van a marcar esa comodidad y el rendimiento del ciclista.
Comodidad del cuadro
Si el stack nos dice lo alto que es un cuadro y el reach lo largo que es, cuadros que tienen un gran stack y un reach pequeño son cuadros altos y cortos, a priori ideales para aquellos ciclistas que busquen o necesiten posiciones más relajadas. Normalmente lo que ocurre con este tipo de geometrías es que al aumentar de talla lo que realmente incrementa es la altura del cuadro incrementando muy poco su longitud. Estos cuadros son denominados por las marcas como “endurance” o “cicloturista”.
Por el contrario, los cuadros que tienen un stack pequeño y un reach grande son cuadros más agresivos indicados para aquellos ciclistas que busquen o necesiten posiciones más competitivas, a este tipo de cuadros las marcas los incluyen dentro de su gama “race” o “competición”.
Algunos ejemplos de cuadros carretera más cómodos de las marcas más populares son: el modelo Madone de Trek, el modelo Roubaix de Specialized y el modelo Synapse de Cannondale.
Tamaño del cuadro
El stack y el reach no solo definen lo cómodo o lo agresivo que es el cuadro también marca su tamaño en valores absolutos. Los fabricantes de bicicleta clasifican el tamaño de los cuadros en sus diversos modelos por medio de tallas que vienen definidas en algunas marcas con letras (XS, S, M, L,…) y expresando la longitud del tubo de sillín otras. En centímetros para carretera (50, 52, 54….) y pulgadas para montaña (16″, 18″, 20″….).
En cualquier modo resultan referencias particulares de cada fabricante. ¿Cuánto es exactamente una M? ¿De dónde a donde medimos los 52 cm? Son referencias que no podemos usar como absolutos para comparar unos con otros.
Ejemplo: si comparamos una Ridley Fenix Disc talla S con una Giant TCR Adv SL 0 de talla M podemos ver que el stack de ambas coincide pero que el reach de la Ridley talla S es 2 mm mayor que la Giant talla M. Es decir, aunque sea con una diferencia mínima, la bici a priori más pequeña es la más grande.
Resumiendo, cuando un ciclista tenga que decidir qué modelo y talla de bici es la más adecuada para él, debe prestar especial atención a la elección del cuadro ideal y a sus características geométricas, las cuales estarán marcadas por el stack y el reach. Lógicamente si el resto de componentes de la bicicleta (manillar, bielas, potencia…) no están bien elegidos la postura sobre ella no será la adecuada.
Nuestra recomendación si quieres adquirir una nueva bici es que acudas a un servicio profesional de bike fitting para que tras definir tu posición ideal te recomienden además del cuadro idóneo la configuración del resto de componentes. Si no puedes acceder a este servicio antes de la compra, te recomendamos que midas tu bici actual para conocer la altura y el alcance que necesitas y en función de estos elegir el modelo y talla de bici que mejor te convenga.