El mercado de corredores WorldTour se ha estrechado de cara a 2017. Ante la desaparición de IAM Cycling y de Tinkoff, ha habido el nacimiento del nuevo Bahrain-Merida y el paso adelante del Bora-Hansgrohe que, sin embargo, no son suficiente y dejan a decenas de ciclistas que corrían en primera división sin contrato.
Desde veteranos trabajadores infatigables a jóvenes prometedores. Cerca de 20 corredores que estaban en el pelotón WorldTour de 2016 siguen sin contrato para la temporada 2017, a menos de un mes de empezar. Algunos de ellos incluso han anunciado ya su retirada. Es el caso de corredores notables como Peter Velits (BMC, 2º en la Vuelta a España 2010, campeón mundo sub23 en 2007) o el francés Jérôme Coppel (IAM Cycling, bronce en el mundial de crono de 2015).
Las desapariciones de equipos han castigado especialmente a su plantilla. En el caso de Tinkoff, su marcha de las carreteras ha dejado sin equipo a dos veteranos como Matteo Tosatto, de 42 años y con 34 grandes vueltas a sus piernas, y al ruso Evgeni Petrov, ganador del Tour del Porvenir de 2002 pero que ya cuenta con 38 años. Ninguno se plantea todavía la retirada, igual que la ha podido esquivar todo un medallista olímpico como Sergio Paulinho, que se ve obligado a volver a Portugal 13 años después y ha firmado por el Efapel.
Además de la retirada de Coppel, la marcha de IAM de las carreteras ha hecho que muchos corredores hayan tenido que descender a la categoría continental. Es el caso del campeón suizo Jonathan Fumeaux, que ha firmado por el equipo Roth junto a otro IAM como Pirmin Lang. Por su lado, el joven Simon Pellaud, sin embargo, ha fichado por el nuevo continental Team Illuminate americano. Pero quien no ha confirmado ningún equipo es el australiano David Tanner, que además sufrió una dura caída entrenando en finales de septiembre.
Foto: @TeamRothGruppe
También los equipos que han sufrido importantes transformaciones están dejando varios corredores en la cuneta. Es el caso del cada vez más internacionalizado Katusha, que con solamente cinco rusos en la plantilla ha dejado sin equipo a Anton Vorobyev (de 26 años solamente, campeón del mundo sub23 de crono), Vladimir Isaychev y el escalador Egor Silin.
Por su lado, un Ag2r-La Mondiale que ha hecho hasta 10 fichajes ha hecho que, por ahora, queden dos corredores de su equipo de 2016 sin el futuro claro: es el caso del croner alemán Patrick Gretsch y de Blel Kadri, todo un ganador de una etapa del Tour de Francia en 2014. En el caso de dos clasicómanos como Damien Gaudin (ganador de una etapa en la París-Niza y 5º en la París-Roubaix 2013) y Sébastien Turgot (2º en 2013), han protagonizado sendas recalificaciones. El primero, al continental Armée de la Terre, y el segundo, directamente a aficionados.
Amets Txurruka representa como nadie el perfil de trabajador al que le cierran las puertas las circunstancias. En un Orica-BikeExchange reforzado con un escalador del nivel de Roman Kreuziger y de un lanzador como Roger Kluge, el vasco se ha quedado sin espacio en la plantilla a pesar de participar en el segundo puesto de Esteban Chaves en el Giro de Italia y en una posición complicada.
Foto: Orica-BikeExchange
Y en una situación similar están dos italianos de Astana. Sorprende el caso de Alessandro Vanotti, fiel a Vincenzo Nibali desde 2007 y que se ha quedado sin equipo a los 36 años, al no entrar en la plantilla del nuevo equipo del siciliano, Bahrain-Merida, ni del conjunto kazajo que también ha cerrado las puertas a Davide Malacarne que a sus 29 años ha hecho un guiño a las disciplinas off-road. “¿Y si el futuro no fuera en la carretera?”, escribía la semana pasada este campeón del mundo junior de ciclocross.
Algo diferente es el caso del Dimension Data, en el que no sigue el sudafricano Sogenzo Jim, que espera encontrar hueco en un continental, ni tampoco dos pistards como el famoso Cameron Meyer, que decidió dejar el equipo a mitad de año y que parece estar reincorporándose a la pista que tantos éxitos le ha dado tras no verse capaz de convertirse en un vueltómano. También un velocista como Theo Bos, seguramente volverá a su especialidad de la velocidad en pista, puesto que aparece entre los posibles participantes del calendario de keirin japonés de 2017.
Still no team for next year but I start my build up to 2017 in the gym anyway,super motivated to show my big potential and my real me again!
— Fredrik Ludvigsson (@Ludvigsson94) 16 de noviembre de 2016
Por último, hay el caso de dos corredores excepcionalmente jóvenes como el de Fredrik Ludvigsson (1994), que se ha quedado sin espacio en la plantilla del Giant-Alpecin de su hermano Tobias. El sueco anunció por Twitter su búsqueda de equipo, un método que funcionó en el caso del bielorruso Ilyia Koshevoy, quien avisó que ya “ha fichado por un Pro Continental” después de quedarse sin espacio en el Lampre-Merida, que pasará a ser TJ Sports, donde si por el cambio de licencia china ha podido entrar Gang Xu.
En el caso del Pierre-Henri Lecuisinier (1993), campeón del mundo junior 2011 y ganador de la prestigiosa Ronde de l’Isard en 2012, se mezclan también los problemas de salud. El francés no tiene salidas tras tres años completos en FDJ sin ningún resultado reseñable, afectado por una enigmática falta de testosterona. “Tras el Tour de l’Ain de 2015, llegué a un punto de no retorno, por saturación física y mental. Me sentía tan incapaz de hacer nada que ya no se trataba del ciclismo, sino de salud. Tenía miedo, no pensando en mi carrera, sino en volver a tener una vida normal”, explicaba al diario Ouest-France este verano.