El equipo W52-FC Oporto cambia todos sus planes de trabajo en el corto y medio plazo. Después de los casos de dopaje y la imposibilidad de mantenerse en la elite, los patrocinadores no han querido irse del ciclismo y han apostado por un equipo muy diferente: formación sub-23, sólo con jóvenes talentos, e incluso con ciclistas con diferentes discapacidades.
Adriano Quintanilha ha confirmado en un comunicado de prensa la intención de respaldar un nuevo club a través de su empresa W52: Fonte Nova – Clube de Ciclismo. Los planes apuestan por un equipo sólo de sub-23 e incluso no se descarta que pueda incluir ciclistas con diferentes discapacidades y el resto de edades de base: júnior, cadetes…
«W52 y Futebol Clube do Porto seguirán apoyando el ciclismo en la próxima temporada deportiva a través de un nuevo proyecto que contará con un equipo sub.23 y apostará por el ciclismo de formación. Anclado en la asociación «Fonte Nova – Cycling Club», el nuevo proyecto se centrará en el desarrollo del ciclismo juvenil, asumiendo también un claro compromiso con la defensa de la ética y los valores del deporte. El nuevo proyecto W52 – FC Porto adoptará una actitud de colaboración con varias instituciones, deseando concertar su acción con entidades como la Federación Portuguesa de Ciclismo y otras del sector deportivo, educativo y social. La estructura y el plan de acción del nuevo equipo W52 – FC Porto serán presentados en breve», explica el comunicado.
Lo cierto es que esta decisión no es la primera vez que sucede en Portugal con un equipo y una marca salpicadas por los escándalos. Liberty Seguros, tras varios positivos, decidió seguir en el ciclismo, pero con una estructura muy joven y con un cambio radical en la gestión. Y aquella decisión permitió que se consolidara un grupo de trabajo del que fueron saliendo muchas de las actuales joyas del ciclismo luso.